Me encanta hablar de innovación. Pero mucho más de poner en marcha los procesos que nos hacen llegar hasta ella. Y me gustá, más aún, desmitificar el término «innovación» y acercarlo más a las personas.
En Design Thinking España, para lograr este objetivo, hemos encontrado una definición de esta palabra que nos parece muy útil. La formulamos al principio de nuestras formaciones, para que todo el mundo se relaje, y no sienta que la innovación es algo tan lejano y reservado a unos pocos y pocas.
De hecho, son muchos los ejemplos que podría ponerte de «héroes anónimos de la innovación», que consiguen aportar muchísimo valor a sus clientes, familiares o amigos. Quizás tú seas uno de ellos o ellas. Para saberlo, lo primero que tienes que hacer es conocer la definición de innovación que voy a darte. Y tirando de memoria, comprobar si tú has llevado a cabo alguna acción que pueda enmarcarse dentro de la misma. Vamos allá.
La definición de Innovación que damos en Design Thinking España.
En Design Thinking España pensamos que para cumplir con el criterio de «innovadora» una acción, proceso, producto o servicio debe responder a dos características principales:
- Su capacidad para aportar valor.
- Su diferencia con respecto a todo lo que se ha hecho hasta ahora.
Puede que al leer esto, te sorprendas, dado que muchas personas asocian innovación a «idea diferente» «tecnología» o algo completamente distinto a lo que se ha hecho hasta ahora. Déjame decirte que, por muy diferente que algo sea, si no aporta valor, no será innovador ¿por qué? porque, sencillamente, aquello que no es valorado no sobrevive. Y, si algo no sobrevive, no se conoce y deja de ser relevante.
Como puedes ver en este dibujo que siempre mostramos al principio de nuestras formaciones, cumplir con los dos requisitos para innovar es posible. Pero necesita de dos factores fundamentales, que tú, en cualquier contexto, puedes desarrollar:
- Entendimiento: De las necesidades, deseos, problemas, oportunidades para las personas etc.
- Creatividad: Para poder generar soluciones, de forma diferente, de las necesidades, deseos etc. que has descubierto que las personas tienen.
Teniendo en cuenta esta definición de innovación, igual empiezas a considerar más innovador de lo que pensabas inventos tan aparentemente sencillos como estos:
- Fregona
- Jeringuillas desechables
- Post It
Tampoco olvides que otros, de una complejidad mayor, como estos, también cumplen con los criterios que te he explicado de innovación:
- Internet
- Imprenta
- Rueda
Innovar es saber hacer regalos
Después de esta introducción, es el momento de explicarte por qué innovar es hacer buenos regalos. Buenos regalos a tus clientes, a tus empleados, a tus compañaros de trabajo, a tu pareja, a tus hijos, a tus padres o a cualquier persona que se te ocurra.
¿Recuerdas la última vez que te hicieron un regalo que apreciaste especialmente? seguramente, cumplía con dos características. En primer lugar, conectaba mucho con algún deseo o necesidad que tenías justo en aquel momento. Por otro, fue un regalo especial, diferente. Distinto al resto que habías recibido incluso durante años.
Si te fijas, estas dos condiciones son las mismas que te indicaba arriba cuando te mostraba la definición de Innovación que damos desde Design Thinking España: aportar alto valor y hacerlo de manera distinta.
Seguro que te has dado cuenta de que las personas que te hacen buenos regalos te conocen bien. Se han esforzado por entenderte, y toman nota de lo que es importante para ti. Además, tienen un toque audaz, buscan darte algo distinto, y no se conforman con lo primero que ven o con aquello que ya te han regalado más veces o que tú mismo les dices que deberías comprar.
Innovar es saber hacer regalos, y lo harás mucho mejor si te preocupas genuinamente por lo que es importante para las personas. Un buen regalo no es aquel que te gustaría que te regalasen a ti, porque puede para ti sean importantes cosas muy distintas a las que le gustan a la persona a la que te estás dirigiendo. Un buen regalo es el que encaja, en la mayor medida posible, con la persona a la que se lo estás haciendo. Y, además, le descubre algo nuevo y diferente que le sorprende gratamente.
Espero que esta entrada te inspire, te anime a hacer regalos significativos en estas fechas navideñas y te ayude a entender la innovación como una suma inevitable de dos factores: la aportación alta y genuina de valor y una forma nueva y sorprendente de hacerlo.
